El Gobierno de Javier Milei Impulsa Cambios en las Facturas de Servicios Públicos
En un reciente movimiento estratégico, el gobierno liderado por Javier Milei ha logrado un doble objetivo: mitigar el impacto de los aumentos en las tarifas de servicios públicos y, al mismo tiempo, ejercer presión sobre gobernadores e intendentes mediante restricciones financieras. Esta medida fue oficializada a través de la Resolución 267/2024 del Ministerio de Economía, publicada este miércoles en el Boletín Oficial con la firma del Secretario de Industria y Comercio, Pablo Agustín Lavigne.
Restricciones a los Municipios: Un Cambio en las Facturas
El gobierno ha dejado claro que solo ciertos conceptos podrán ser incluidos dentro de las facturas correspondientes a servicios esenciales como luz, gas y agua. La medida había sido anticipada por el ministro de Economía, Luis Caputo, quien advirtió públicamente que «LOS MUNICIPIOS YA NO PODRÁN INCLUIR IMPUESTOS Y TASAS EN LAS FACTURAS DE SERVICIOS».
Caputo también compartió una imagen ilustrativa donde se observa cómo algunas tasas municipales casi duplican el monto total a pagar por los usuarios. Entre estos recargos adicionales se incluyen tasas relacionadas con seguridad e higiene, cuotas sociales para bomberos o asociaciones cooperadoras para hospitales locales.
Impacto Directo en los Consumidores
La nueva normativa establece que las facturas emitidas por proveedores deben contener exclusivamente información relacionada con el servicio contratado. Esto significa que no podrán incluirse cargos ajenos al bien o servicio específico suministrado al consumidor. Según lo estipulado en la resolución oficializada hoy: «La información contenida deberá referirse únicamente al bien o servicio contratado específicamente por el consumidor».
Este cambio comenzará a regir dentro de 30 días hábiles desde su publicación oficial para permitir una adecuada adaptación tanto para empresas proveedoras como para municipios afectados.
¿Una Falsa Sensación?
Aunque esta medida podría generar una percepción inicial entre los consumidores sobre una reducción aparente del costo final reflejado en sus facturas mensuales debido a la eliminación temporalmente visible (aunque no real) respecto aquellos impuestos locales previamente incluidos; simultáneamente continúan aplicándose incrementos tarifarios significativos impulsados directamente desde Nación.
De esta manera queda claro cómo busca manejarse políticamente dicha situación generando alivio visual inmediato sin necesariamente reducir costos reales asociados
