Buenos Aires, 29 de agosto de 2025. — El miércoles por la tarde, el presidente Javier Milei tuvo que ser evacuado durante una caravana electoral en Lomas de Zamora luego de que manifestantes comenzaran a arrojar piedras, huevos, botellas y otros objetos contra la comitiva presidencial, que estaba integrada por él, su hermana Karina Milei y el diputado José Luis Espert.
La agresión se produjo cuando la comitiva circulaba por el centro de la localidad, provocando una situación de tensión que terminó con la suspensión del evento y la salida acelerada de los funcionarios en vehículos de seguridad. Aunque no se registraron heridos, en los instantes posteriores se registraron enfrentamientos entre simpatizantes y opositores, y se realizaron al menos dos detenciones.
La respuesta oficial del gobierno fue inmediata y contundente: desde la Casa Rosada, acusaron al kirchnerismo de haber organizado el ataque. El vocero presidencial, Manuel Adorni, calificó a los agresores como “militantes de la vieja política” y sostuvo que recurrían a la violencia porque “carecen de ideas”. También la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, responsabilizó al kirchnerismo por el incidente y afirmó que se puso en riesgo tanto a las autoridades como a la sociedad que participaba del acto.
Por su parte, el gobernador bonaerense Axel Kicillof puso el foco en una supuesta falla en el despliegue de seguridad presidencial, observando que la custodia no previó un clima de tensión como el que se vivía en Lomas. Además, señaló que algunos gestos de los propios dirigentes de La Libertad Avanza podrían haber contribuido al clima de confrontación.
El episodio se da en medio de un escenario electoral ya dinámico: faltan pocos días para las elecciones provinciales en Buenos Aires (7 de septiembre) y legislativas nacionales (26 de octubre). Además, la campaña está marcada por los recientes escándalos de corrupción que involucran a la hermana del presidente, lo que añade un elemento de presión adicional sobre su imagen pública.