Buenos Aires, 10 de octubre de 2025. En una sesión marcada por intensos cruces entre oficialismo y oposición, la Cámara de Diputados aprobó este miércoles por la noche el proyecto de ley que restringe el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) por parte del Poder Ejecutivo. La medida, impulsada por bloques opositores y acompañada parcialmente por legisladores aliados, busca reforzar el control del Congreso sobre las decisiones unilaterales del presidente Javier Milei.
El texto, que ahora deberá ser debatido en el Senado, establece que todo DNU deberá ser revisado y votado por ambas cámaras en un plazo máximo de 15 días hábiles. Si el Congreso no lo aprueba expresamente, la norma quedará automáticamente sin efecto.
“Un paso hacia el equilibrio republicano”
La iniciativa fue defendida en el recinto por el diputado Facundo Manes (UCR), quien aseguró que “el Congreso no puede seguir siendo un sello de goma de ningún gobierno”.
“Los decretos deben ser una herramienta excepcional, no una forma de gobernar. Esta ley devuelve al Parlamento el rol que la Constitución le asigna”, señaló Manes.
Desde el oficialismo, el bloque de La Libertad Avanza votó en contra y denunció que el proyecto busca “condicionar la gobernabilidad”.
“Pretenden limitar al Presidente en plena crisis. Es una maniobra política de quienes no aceptan que el pueblo eligió un cambio profundo”, replicó el libertario Oscar Zago, jefe de bancada oficialista.
El proyecto se aprobó con 129 votos a favor, 110 en contra y 12 abstenciones, luego de más de nueve horas de debate.
Contexto político y antecedentes
La discusión se produce en medio de un clima político tenso, tras una seguidilla de DNU firmados por el presidente Milei durante su primer año de mandato, muchos de ellos con impacto económico inmediato —como la desregulación de precios, privatizaciones parciales y cambios en el sistema previsional—.
Juristas y constitucionalistas habían advertido en los últimos meses sobre el uso extensivo de facultades extraordinarias, mientras que sectores opositores denunciaron una “concentración de poder” en el Ejecutivo.
La nueva norma se inspira en proyectos presentados años atrás por el radicalismo y el socialismo, pero que nunca habían logrado avanzar. Esta vez, la confluencia de varios bloques —UCR, Hacemos Coalición Federal, Unión por la Patria y parte de Evolución— permitió alcanzar la mayoría.
Qué cambia con la nueva ley
El proyecto aprobado establece que:
- Los DNU sólo podrán dictarse en casos excepcionales de “grave emergencia nacional”.
- El Ejecutivo deberá comunicar el decreto al Congreso dentro de las 24 horas posteriores a su publicación.
- El plazo para su validación será de 15 días hábiles, prorrogable una sola vez.
- Si el Congreso no se pronuncia, el decreto pierde vigencia de manera automática.
Además, se crea una comisión bicameral permanente que deberá elaborar un informe mensual sobre los decretos emitidos y su grado de cumplimiento.
Repercusiones y próximos pasos
Organismos como el Centro de Estudios Constitucionales y Políticos (CECP) celebraron la aprobación de la ley al considerarla “un avance hacia la transparencia y el control institucional”.
En tanto, desde la Casa Rosada prefirieron no emitir declaraciones formales, aunque fuentes cercanas al Ejecutivo adelantaron que Milei vetará la norma si es sancionada por el Senado, por considerar que “entorpece la gestión y debilita la capacidad de reacción del Gobierno”.
El proyecto será tratado en las próximas semanas por la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado, donde el oficialismo confía en poder bloquear su avance.